Ruman Origin Farmstead: Tradición y Futuro en el Campo

Un refugio rural sostenible que fusiona historia, innovación y cultura

Situada en las afueras de Chengdu, en medio de arrozales, Ruman Origin Farmstead se erige como un homenaje a la arquitectura vernácula de Sichuan occidental. El proyecto, galardonado con el Silver A' Design Award 2025, se compone de tres patios que representan distintas épocas arquitectónicas, desde la tradición hasta la visión de futuro. Cada espacio ha sido concebido para responder a las necesidades de alojamiento, exposición, reunión social y vida cotidiana, integrando la serenidad rural con el confort urbano.

La singularidad del diseño radica en su estructura tripartita: el primer patio, construido íntegramente en madera, evoca la estética y el valor histórico de las edificaciones ancestrales de la región, funcionando como área de recepción. El segundo patio, de carácter moderno y multifuncional, alberga un restaurante y espacios polivalentes, reflejando la apertura y funcionalidad del diseño contemporáneo. El tercer patio, concebido como vivienda independiente, fusiona elementos tradicionales y modernos, apostando por un estilo de vida sostenible y adaptado a las necesidades actuales.

La sostenibilidad es uno de los pilares fundamentales del proyecto. La vivienda incorpora materiales convencionales y técnicas constructivas locales, pero destaca por la integración de paneles solares fotovoltaicos y bombas de calor geotérmicas, que cubren la demanda energética de manera eficiente. Además, se han implementado soluciones como suelos elevados, fachadas de tierra apisonada, patios interiores y sistemas de puertas y ventanas de doble capa, lo que reduce significativamente el consumo energético y mejora el confort térmico.

El proceso de diseño incluyó una exhaustiva investigación social, con entrevistas a residentes locales de diferentes edades y profesiones. Este enfoque permitió adaptar la propuesta arquitectónica a los patrones de vida, hábitos y prácticas culturales de la zona, garantizando una integración armónica con el entorno y una respuesta auténtica a las aspiraciones de la comunidad. Según datos del equipo, la superficie construida total alcanza los 1.200 metros cuadrados, en una parcela de 4.000 metros cuadrados.

El mayor reto del proyecto ha sido equilibrar la preservación de los rasgos arquitectónicos tradicionales con la incorporación de tecnologías y funciones modernas. La propuesta demuestra que es posible mantener la identidad histórica y cultural de una región, al tiempo que se apuesta por la innovación y la eficiencia energética. Ruman Origin Farmstead no solo representa una obra arquitectónica, sino también una iniciativa de restauración cultural y revitalización social, invitando a repensar el futuro del hábitat rural en China y más allá.

Ruman Origin Farmstead se consolida como un referente de arquitectura rural sostenible, capaz de inspirar nuevas formas de habitar el campo y de fomentar el retorno a estilos de vida más conectados con la naturaleza y la tradición, sin renunciar a la innovación y el bienestar contemporáneo.