Artifact: Un Viaje Surrealista en el Corazón de Hong Kong

El Bar Speakeasy de Nelson Chow que Desafía la Realidad

La esencia de Artifact reside en su capacidad para transportar a los visitantes a un reino de tranquilidad y misterio, alejado del ajetreo de la vida urbana. Inspirado en la geometría surrealista y las atmósferas serenas de los cisternas subterráneos, este espacio oculto detrás de un pasaje secreto en BaseHall, el nuevo destino gastronómico de lujo de Hong Kong, ofrece una experiencia inolvidable. Los huéspedes son recibidos en un mundo paralelo, donde el diseño y la arquitectura se unen para crear una atmósfera única.

El acceso a Artifact no es convencional: una entrada disimulada con ventanas circulares evoca la imagen de tuberías industriales, mientras que la iluminación tenue y las paredes con textura de hormigón sugieren un páramo industrial abandonado. La adición de luces colgantes con forma de cámaras de vigilancia intensifica el enigma y la intriga del espacio.

La cámara acústica es una proeza de diseño, con paredes revestidas de baldosas que imitan altavoces, bloqueando el ruido exterior y creando un efecto desorientador. La repetición de estas baldosas engaña al ojo y contribuye a la atmósfera surrealista, evocando la sensación de estar confinado dentro de un buque. En el bar principal, estructuras que recuerdan a las costillas de un cisterna dan la bienvenida a los invitados, con una iluminación ambiental que subraya los arcos audaces y crea un ambiente sereno.

La realización de Artifact fue un desafío técnico y creativo. Para la fabricación de las formas precisas de las costillas en el bar principal, se empleó un molde 3D y se moldeó fibra de vidrio en secciones, que luego se ensamblaron in situ. La pintura de yeso suave, aplicada a mano, añade el toque final a este meticuloso trabajo. La combinación de tecnología y artesanía es evidente en cada detalle del diseño.

Con aproximadamente 1400 metros cuadrados, Artifact no solo es un espacio para disfrutar de una bebida, sino una obra de arte en sí misma. La investigación detrás del proyecto incluyó el estudio de cisternas subterráneas y el trabajo de surrealistas como Ernesto Neto y James Turrell, con el objetivo de crear un entorno inmersivo que manipule la percepción y ofrezca una experiencia envolvente.

Los desafíos del diseño fueron superados con ingenio: desde la transición del bullicioso salón de comidas a un espacio de calma hasta la creación de una sensación de altura en un espacio con techos bajos, utilizando espejos para reflejar las estructuras y ampliar visualmente el lugar. Artifact, galardonado con el Golden A' Design Award en 2024, es un testimonio de la excelencia en diseño y un hito en la escena de bares de Hong Kong.